El invierno fue mediocre. Una tecnología
de las huellas para no perdernos por la nieve
y remontar a los [escatológicos] esbirros
en los huesos que acechaban al Maestro.
Mutación y pasmo como hosanna. Signo.
¿Lucharemos bajo el cielo alguna vez?
y pocos minutos luego cae el gesto del ratán
disciplinario en lo coriáceo de los pectorales.
Nunca huimos de la sangre, pero es blanca.
Igual que las almohadas rinde su comodidad.
Su estrago. Ya apiadémonos de ti.
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